Niños y niñas hasta los 7 años tienen un comportamiento de su visión distinto al del adulto y así hay que tratarlos; sus necesidades son otras y su desarrollo nos obliga a controlarlos frecuentemente para conseguir el mayor aprovechamiento de sus cualidades
La falta de rendimiento escolar, alteraciones de postura, excesiva afición por las actividades de cerca (pintar, Legos, Tablet, etc.) puede denotar un problema de rendimiento visual, aunque el niño diga ver bien
